Scroll to top

category: Arte

Casa tomada

No nos miramos siquiera. Apreté el brazo de Irene y la hice correr conmigo hasta la puerta cancel, sin volvernos hacia atrás. Los ruidos se oían más fuerte pero siempre sordos, a espaldas nuestras. Cerré de un golpe la cancel y nos quedamos en el zaguán. Ahora no se oía nada.
–Han tomado esta parte –dijo Irene.
El tejido le colgaba de las manos y las hebras iban hasta la cancel y se perdían debajo. Cuando vio que los ovillos habían quedado del otro lado, soltó el tejido sin mirarlo.
–¿Tuviste tiempo de traer alguna cosa? –le pregunté inútilmente.
–No, nada.

Julio Cortázar

  • Date

    agosto 18, 2013

  • Skills

    Acrilico

  • Client

    Biblioteca del Congreso de la Nación

Abrir chat
Powered by